jueves, 9 de febrero de 2012

PERTURBACIÓN



 
Me seduce en el peor momento de mi vida y disfrutamos de seis meses de desenfreno, en los que cada noche me recuerda que no se conforma con mi cuerpo, sino que quiere también mi alma. Aunque no es mi tipo de mujer, me dejo llevar y disfruto de los lujos de su riqueza. Sobre todo del yate en verano y de la mansión en la sierra que pertenece a su familia desde que la construyó su bisabuelo, Mauricio Bafomet, al volver rico de América.

Pero lo cierto es que no la amo y acabo aburriéndome. Elijo la zozobra de un atardecer de domingo, antes de volver a la ciudad, para poner fin a mi farsa. Como no quiero herirla, apuesto por la mentira y le hablo de los sentimientos que se apagan. «El amor es como el café», le digo ya al final de mi alegato, «una vez que se enfría, aunque se recaliente, ya no sabe igual».

Ella sonríe con aparente desprecio y repite mis palabras como si estuviese sopesándolas en la palma de su mano. Aunque siempre intuí que nunca decía lo que pensaba sino lo que más se ajustaba a sus intereses, esta vez no puede disimular el desdén que asoma a sus ojos al mirarme y con un tinte de virulencia en su voz, me insinúa que lamenta el error que he cometido.  Me advierte, luego,  que no lograré deshacerme de ella. Que siempre estará en mí. Que su sombra será la mía. Que olvide cualquier intención de huir. Que no tengo salida. Que soy suyo, una más de sus pertenencias. Que ya decidiría ella el mejor momento para prescindir de mí.

«Estás loca» es lo último que articulo antes de darle la espalda, al tiempo que  oigo  el crujir de las bisagras de las contraventanas al cerrarse y veo cómo la puerta se abalanza por sí misma para encajarse en su marco.

Me vuelvo para mirarle pero ya no está. Me giro buscando la forma de huir y encuentro mis ojos en el espejo que corona la chimenea encendida, pero es su rostro el que veo.

*
[Imagen obtenida de Google]
*

70 comentarios:

Unknown dijo...

Me ha gustado esta historia Pedro. Tu blog es de los que más me gusta leer, porque en tus escritos encuentro una primera lectura simple que ya dice muchas cosas y luego al releerlo descubres nuevas claves ocultas perfectamente encajadas.
Un placer pasar a leerte.

Juanlu dijo...

Yo voy por la primera lectura y ya me encanta, mantiene la tensión, cierto miedo a las meigas...

un abrazo!

escarcha dijo...

ella ya está en él!!!!
buen texto!!

saludos
www.elblogdeescarcha.blogspot.com

Javier Ximens dijo...

Pedro no quiero comentar hasta leer tu texto varias veces. Es un gustazo relamerse las distintas texturas que proporcionas. Tu admirador fiel.

Anita Dinamita dijo...

Me pasa lo mismo, es un texto a capas, y la primera ya sabe buena... voy a seguir catando.
Besos

Loli Pérez dijo...

Pedro, en cada relato nuevo logras sorprenderme, hacer que sienta un desasosiego hasta llegar al final y que a lo largo de varios días lo siga rumiando y vuelva de nuevo a leerlo.

Abrazos soleados

XAVIER BLANCO dijo...

Pedro, Hace semanas que te debía un comentario. No me sorprendes, porque tu estilo impregna cada uno de tus textos. La palabras van creando el espacio:zozobra, atardecer, farsa, mentira, desdén, crujir...envolviendo la historia, y esa perturbación nos lleva al final...y me quedo helado preguntándome si esa mujer existió alguna vez, o es sólo el fruto de una mente quebrada...
Un abrazo

Ella dijo...

Muy interesante este texto y muy enigmático...
Pero desde luego sea una mujer real o una proyección de él mismo es seguro que no logrará escapar de ella...
Un beso.

Janial dijo...

A lo dicho en los comentarios anteriores, solo añadir que, dado que este febrero corresponde a un año bisiesto, bien podrías explayarte un poco con otro relato antes de que acabe el mes. Gracias.

David Vivancos Allepuz dijo...

Perturbador.

fus dijo...

Da miedo encontrarte con una persona que no reconozca el final de un amor. Me ha gustado mucho tu relato.

un fuerte abrazo

fus

Unknown dijo...

El tipo de cuento que más disfruto: el que deja espacio, el que debe completar el lector. Terror fantástico? Psicológico? Lo que yo como lectora decida para mí. Inquietante.
Bravo, Pedro!

Un abrazo

MJ dijo...

Caballero, un placer venir a tu casa, sentarme un ratito y leer los microrrelatos que salen de tu cabeza y que tan primorosamente escriben tus dedos obedientes.
Nada más que añadir.

Un abrazo.

MA dijo...

Hola sigo tu blog desde este momento.
Te invito a visitar mi casa de letras El blog de MA.

Buen texto muy perturbador en su perturbación la vida nos da una de cal y otra de arena... y hay que aceptar la realidad nos guste o no es lo que hay...

Saludos blogueros.
MA.
El blog de MA.

Nicolás Jarque dijo...

Pedro, que bien hilado el relato en el que se demuestra que no todo vale para satisfacer al corazón. Y como juegas con nosotros y nos sorprendes al final con ese final abierto a la intriga y al misterio.

Es sin duda una gran pieza desde el principio al final.

¡Felicidades! y a seguir escribiendo más a menudo, es un placer.

Un fuerte abrazo.

mili dijo...

Un muy buen relato y un final que me desconcertó...se cumple lo que ella le dijo, él la sigue viendo.

Si me permites te agrego

abrazo

Susana Camps dijo...

Mira que es difícil el terror (el que emociona, claro), y realmente lo bordas en esos dos párrafos rápidos y precisos al final, un cierre excelente para un micro muy efectivo y proporcionado. También me gusta mucho el dibujo de los personajes... un gustazo, gracias.

Anónimo dijo...

óRALE, qué rara forma de embrujo, me agradó que fuera inesperado ese final.

Luisa Hurtado González dijo...

Y ahora ¿qué puedo decir yo?
Que releas todos los comentarios, que suscribo punto por punto, mientras los demás te leemos y releemos.
Felicidades, un micro perturbador y muy bien llevado.

Anónimo dijo...

Me ha encantado encontrarte a tí también Pedro!! Un relato que despista entre yates y desamores..para ir mucho más allá. Me ha encantado leerte. Te seguiré de cerca!!BErta

Javier Ximens dijo...

Como siempre, felicitarte por tu prosa seductora, pausada, con tono de amargura. Como no entiendo el final, lo fácil sería pensar que esa mujer es La Muerte, pero ¿que sentido tiene? Además, esa señora no tiene yate. Para mi que los que nos quieres contar es como un personaje lleva unos meses jugueteando con algo de riesgo: lujo, placeres, etc, que termina matándole. Pero vete tu a saber.
Pedro, gusto en leerte.
Si aparece un tal Mauricio Bafomet es por algo, pero no logro saber porqué.
¿Ese "abalanzaba" no es "abalanza"?

JOAQUIN DOLDAN dijo...

nacimos perturbados, escribimos para perturbar

un abrazo

manuespada dijo...

Hace años escribía relatos de terror, y los leía, muchos, y es un género muy difícil. Me ha gustado mucho cómo mezclas lo que parece una historia de desamor interesado con el horror, es muy cinematográfico. Genial, Pedro, manejas el género muy bien.

matrioska_verde dijo...

un relato muy intrigante con un total perturbador; has escogido el título perfecto.

bqñs,

Gemma dijo...

A eso se le llama un acto de posesión en toda regla, sí señor.
Más abrazos

Laura dijo...

Pero qué miedo Pedro, encontrarte con alguien así, que te posee hasta el último momento y que tiene la potestad de decidir cuándo te deja.
¿Quién es ella?, es su alma?, ¿se enamoró del desenfreno de un alma loca que salió como un vendaval de su cuerpo y únicamente le ofreció la satisfacción de "reconocerse" en el espejo ....?. ¡Buf!, ¡hay amores que acaban matando!.

Me ha encantado el microrrelato. Debieras ponerle un marco esta perturbación y proponer que cada uno te ofrezca su punto de vista.

Enhorabuena porque tus lecturas siempre sorprenden, para bien, nunca para mal.

Un abrazo para tí.

Anónimo dijo...

¿Que se trajo Mauricio Bafomet de América, además del dinero, para que su nieta resulte tan peligrosa? A poco que se descuide, el tipo terminará encerrado en un manicomio y dando alaridos en aimara :D Le está bien, por aprovechado, jeje.

Un abrazo :)

Aristóteles dijo...

La vida, el amor,... se construyen.
Gracias por la historia.
Un abrazo fuerte para ti.

Zaraceno dijo...

Excelente Pedro. Me gustó.

Mar Horno dijo...

Me ha gustado mucho Pedro. Lo que parecía una historia de amor posesivo y obsesivo acaba con un terror fino y duro recorriéndonos la espalda. Muy bueno. Un abrazo.

Paloma Hidalgo dijo...

Dominas las sensaciones fuertes, las manejas con soltura, impactas en el lector. LLeva tu impronta, quizás por eso me guste tanto.

Un abrazo

Elysa dijo...

Como siempre con tu manera elegante de narrar. Nos vas llevando de una forma pausada por todos los detalles que nos muestran a este individuo no muy "inocente" y la relación posesiva en la que se ha embarcado.
Y ese final... bueno, como ahora el micro ya es mío, decido que el tipo ha caído en las garras de alguien que tiene poderes más allá de este mundo cconocido como real.
Pues, eso que me ha gustado mucho.

Besitos, muchos

ESPERANZA dijo...

Pedro ¡que miedo! No se que tienen tus textos pero me atrapan desde la primera línea, me pasa lo mismo que a tu protagonista que es absorbida y poseída por su propia historia.

Me quito el sombrero,

Un abrazo,

Miguelángel Flores dijo...

El diablo puede adoptar la imagen que quiera, y lo dejas claro. Y me gusta que hasta el final no sea así. Tienen una conversación lógica hasta que deja de serlo para pasar a ser eso, una historia de posesiones pero a otro nivel. Bravo. Quizá, Pedro, no me acaba de encajar el título, vamos, al menos con la historia que yo me llevo.

Abrazos.

Miguel Ángel Pegarz dijo...

Magistral.

AtHeNeA dijo...

Atrapado, enterrado en vida ... prisionero de su propia suerte y destino.
Buen texto.
saludos desde isla de luz

Cabopá dijo...

Es de ser bien nacida, ser agradecida. Gracias por estar en mi ventana...Después vengo a leerte entre cacharros de cocina me hallo..
Besicos

Lola Sanabria dijo...

Me gusta cómo presentas a esa arpía que está dispuesta a formar parte de su peor pesadilla al desgraciado que osó poner sus ojos en ella. Me gustan las metáforas como el del café frío. Me parece, en definitiva, un excelente relato.

Abrazos sin grilletes.

Gorgias dijo...

Gran calidad, la de este relato. Y -como resulta habitual- la solución... en la última frase. Enhorabuena.

Γοργίας

GeNN dijo...

Aterrador.

Dominas los entresijos y te mueves muy bien en el género.

Saludos.

Esteban. dijo...

Realmente merecedor del titulo a quien porte semejante destino.
Atrapante.

Saludos,
Esteban

Juan Ojeda dijo...

Me encantó la forma en que está escrito, como se van delineando los personajes con trazos que por delicados no escatiman en firmeza; más allá de la maldición nacida del despecho me quedé pensando en la mentira. La mentira siempre es verdad de alguna forma, porque él se dejó llevar por ella escapando del peor momento de su vida (y por allí hay una verdad),

El final parece ineludible; uno siempre acaba siendo lo que toma para abandonarse, y si encima luego lo abandona también... el desierto se proyecta en el espejo (quizás),

Creo que él hacia tiempo que quería dejar de ser.

Un abrazo, me gustó mucho.

Nel Morán dijo...

Me gustó tu forma de escribir desde el primer día que entré en tu blog. Tienes una cualidad que te persigue: vas dejando que el lector descubra la historia poco a poco hasta que al final se da cuenta que estaba equivocado.

La mala de la película dijo...

Y va y me toca el comentario 44. Te parecerá bonito, tanta gente que te lee. No estoy segura de comprender bien esta historia, pero seguro que se debe a mi falta de madurez. Me he propuesto releerla dentro de unos años, a ver si saco algo en claro, por el momento, me conformo con entender el tema de matemáticas que debería estar estudiando en estos momentos :D Un abrazo!

Mei Morán dijo...

Es un texto trufado de posibles lecturas. Muy ricas las alusiones.
Saludos

Sergio Cossa dijo...

Ese personaje sí que quedó "entre nunca y quién sabe" :))
Un final abierto a varios supuestos... Muy buen micro, Pedro.
¡Saludos!

Anónimo dijo...

Aterrador, más aún porque dejas mucho a la imaginación del lector y eso le da más tensión todavía.

Paula Sánchez Álvarez dijo...

Si hay algo mejor que leer, es releer... Aunque hagan falta cuatro o cinco veces para terminar de entenderlo. Que ya sabes que no es un fallo del escritor, sino de la lectora (y mira que es lista la jodía)

Me gustó. Lo entendí y me gustó. Pero me costó más que otros y eso sí que no me gusta. Que seguramente el fallo sea mío, repito.

Aún así, y al margen de mis amplio campo de desconocimiento, he de decir que empieza a marcarse ya tu género. Micro de terror, de tensión, de suspense, con esos finales que dejan a uno sin saber como recobrar el aliento, definiendo personajes sutiles con trazos contundentes. Con hechos y no con palabras, y queda bonito. La mano de obra es muy buena, la verdad, y cada día mejor.

Sí que te pido, ya como algo personal, que no descuides los textos más largos. Quizás los obvias aquí por motivos de comodidad al lector o quizás no, y me preocupa. El micro está bien, sí. Se te da bien, sí. Eres un genio... bueno, sin pasarse... El caso es que, como dice Dolores, ya solo queda el papel. Y la verdad es que es un salto mucho más pequeño de lo que tú crees, por mucho que te empeñes. ¡Te lo juro! (Y no me digas "Yayaya" como el otro).

Un beso
Siento la tardanza

Carry on.

Javier Ortiz dijo...

Muy ameno el micro. Lo que más me gustó fueron los dos últimos párrafos: llenos de ambiente y suspenso.

Saludos.

Raquel dijo...

Me gustan tus micros, como nos cuentas una historia en tan poco espacio y como nos sorprendes siempre al final pero... Estoy de acuerdo con Bágoas, yo también echo de menos tus cuentos, que tienes tan abandonados... No lo dejes!!!
Feliz día de SV, mi amor!!!

Lucas Fulgi dijo...

De alguna manera todo vive en nosotros. Quedará en él encontrar la forma de terminar de otra forma ese error que cometió.

Unknown dijo...

Contiene ése penetrante terror de algo que se percibe como real y no como una ficción.
Lo ejecutaste magistralmente y sin decirlo dejas moraleja de hacer mutis silencioso, ya vez lo que le costó al personaje la compasión.

MTeresa dijo...

El terror condensado
se multiplica,
es un texto estremecedor

Malena dijo...

Uf. Muy bueno. Él debería haber descubierto antes que ella tampoco lo amaba. Sólo era un objeto con el que se había encaprichado. Y no hay nada peor que una mujer encaprichada.

mientrasleo dijo...

Un relato bárbaro que asoma múltiples significados a nuestros ojos.
Me encantó.
Un abrazo

Beatriz Salas Escarpa dijo...

Has relatado la realidad de muchas relaciones... Lo siniestro son las consecuencias de cada una de ellas.
Me ha gustado leerte.
Un abrazo.

Humberto Dib dijo...

Muy bueno, Pedro, me deja con varias interpretaciones en el tintero, pues no me conforma del todo la de la pareja que se separa. Tal vez vea más de lo que dice, quién sabe...
Un abrazo.
HD

Unknown dijo...

De haber resuelto el problema a tiempo se habría evitado ese fondo turbulento en la relación y vuestras pupilas ensachadas por el veneno, al menos las de ella, se abrian derritido antes de llegar al abuso. Buen relato con un final inquietante.
Saludos y creo que me quedaré en tu blog para seguir leyendo.

Iñigo dijo...

No sé si les habrá pasado a los demás pero cuando estás leyendo las últimas lineas notas que te falta el aire. Magnífico Pedro.

Carmen dijo...

Quería su alma y la ha conseguido. Y tú has conseguido, por lo que leo, tenernos a todos pendientes de cada una de las palabras de este escrito.

Muy bueno, Pedro; pero eso tú también ya lo sabes...

¡Biquiños!

Carmen

Anónimo dijo...

Hola, Pedro.

Aquí estoy, devolviendo la visita y la tacita de azúcar.
Me he metido hasta la cocina y, aunque parezca un cumplido, también me gusta mucho lo que encuentro.
Coincidimos en el juego de los espejos. El espejo en la chimenea, que bien refleja a los gemelos de Supersite o a la madre y su Defensa propia...
Te seguiré. También dejo abierta la puerta desde mi propia casa...
Encantada con el encuentro.

Midala dijo...

Vaya relatoooooo Pedro!!Genialll, a veces, algunas mujeres pueden ser venenosas jajajjajaja y no se conforman con el cuerpo,quieren el alma también.Bueniiiisimo, lo bordaste hasta el final,si señor!!

Melvin Rodríguez Rodríguez dijo...

WOW, nunca es tarde para disfrutar de un buen relato. No conocía este blog pero he visto que ambos estamos por la blogósfera de los micros así que vine a leerte. Qué fuerte este micro, demasiado fuerte. Esa advertencia de querer el alma choca en la vuelta de tuerca. Divertido y como indica el título, perturbador. ¡Saludos!

Araceli Esteves dijo...

Esa sí es una posesión en toda regla. Hay amores así, que por quitarte, te quitan hasta la identidad.Me encantó la metáfora.

Susana Pérez dijo...

Ya te he visitado algún que otro día, y hoy, al leerte, casi me dejas fría. Mucha fuerza tiene este micro, me gusta...

Abrazos

Isabel Martínez Barquero dijo...

Inquietante y muy bueno.
Admite varias lecturas, señal de buena literatura.
Particularmente. me quedo con la de los espejismos de los sentimientos y las jugadas que nos gastan. Creemos no querer y queremos, aunque sea de una forma perturbada.
Claro, que también cabe interpretarlo como un cuento gótico donde una Circe secuestra al hombre de su capricho.

Ay, estoy encantada de andar por aquí.

Alberto Flecha dijo...

Un placer, Pedro, encontrar tu blog y disfrutar de tu escritura cuidada y de tus historias. Con tu permiso me seguiré pasando por aquí, merece la pena.
Saludos.

I.R.H dijo...

Es breve y a la vez complejo... pero cuenta mucho.
Tus demás mmmm "fans", tienen razón. Consigues que la primera
lectura sea buena, y aunque la expresión es sencilla dan ganas de volver a leerlo para alcanzarlo realmente. *.*
*Ya te sigo* :D
Saludos!!

http://viviendoentremisletras.blogspot.com/

Miguel dijo...

Que peligrosas son las mujeres y más cuando las dejan pasear por tu imaginación Pedro.

Dos veces lo he tenido que leer, pero deja buen sabor de boca y una sonrisa picarona que te hace pensar.

¡qué envidia de tu forma de escribir e inteligencia!

Una abrazo

Miguel

David Cotos dijo...

Buen cuento, te atrapa.