lunes, 10 de diciembre de 2012

AMISTAD




Con la coartada de apoyarle en esas circunstancias difíciles, estreché nuestra relación con Paco cuando enviudó y se quedó solo con una hija adolescente de catorce años. Poco a poco los fuimos incorporando a nuestra vida familiar. El desconsuelo por la pérdida de su mujer y la carga por la responsabilidad de sacar adelante a su chiquilla, hacían de él un hombre emocionalmente encorvado. Por suerte su docilidad no se vio afectada y como siempre fue un hombre encantador, se dejó arropar por nosotros. Marta y yo, después de diez años de matrimonio, no teníamos niños y volcamos en su hija toda nuestra atención. Lo que ni Paco ni Marta llegaron a sospechar nunca fue que mi propósito último era seducir a aquella Lolita que ya entonces parecía ser consciente de poseer un culo capaz de modificar las voluntades más férreas. 


Cuatro años después –sin haber sucumbido aún a mis infinitos asaltos, parapetándose detrás de una sonrisa perturbadoramente lúbrica y desarmándome con sus constantes «¡Ay, tío Emilio, qué cosas me dices!»– he de soportar que la niña se marche a la universidad a cuatrocientos kilómetros; mientras mi mujer y Paco llevan tres años valiéndose de cualquier pretexto para perderme y aprovechar sus momentos de, digamos, concupiscencia.


-oOo-

[Imagen obtenida de Google]


80 comentarios:

Anónimo dijo...

Como dice el refrán: "Nadie sabe para quién trabaja"...

Buen relato, Pedro...

Pablo Vázquez Pérez dijo...

Hola Pedro.
Me gusta mucho la voz del personaje, las has captado perfectamente, cómo va relatando su plan. Vaya elemento, se merece todo.
Un abrazo.

Fran Rubio dijo...

"Ir por lana y volver trasquilado" también se le podría aplicar.
Como siempre, una buena historia bien contada, Pedro.
Un abrazo.

Alfonso Carabias dijo...

Genial Pedro, como de costumbre.

Perseguir un sueño a veces nos deja descolocados al despertarnos.

Un saludo.

escarcha dijo...

jajaja, está muy bueno, se quedó sin el pan ni la torta.
Abrazos Pedro

Arte Pun dijo...

Pues sí todo revuelto, y creo que al final acabará él fuera de casa. Como ha dicho alguno tal vez se lo merezca.

Gracias por el relato Pedro.

** He escrito un poema en el que menciono tu blog junto a otros muchos, se llama "Pasión bloguera", no lo he enlazado porque me iban a dar las uvas, te invito a echarle un vistazo.

Un abrazo

Bee Borjas dijo...

Jajaja!!! Estupendamente narrado!!! Sentí que me lo estaba contando a mí, sentados en un bar y con un bizarro gesto de impotencia!
El cazador cazado!
Pedro, te haces esperar, pero cuando publicas es toda una celebración!
Un abrazo enorme, amigazo!!!

María dijo...

Bonito relato que engancha hasta el final.

Un beso.

Anónimo dijo...

Genial. "La vida es aquello que te va sucediendo mientras tu te empeñas en hacer otros planes" dicen que afirmaba Lennon.

Abrazo grande

Elena Casero dijo...

Se veía venir lo de la Lolita pero no lo del amigo. Me ha gustado mucho Pedro, está bien llevado el relato.

Un abrzo

Anónimo dijo...

:D

Pobre hombre...no es que no se lo merezca, pero da penica, sobre todo porque uno espera que si tarda un poco más en contarlo lo va a contar desde la ventana de enfrente, en el piso al que se ha mudado después de que su mujer lo mandara a regar ;) y desde donde mira y se complace en la desdicha, jaja.

Que alegría, Pedro, tu vuelta.

Un beso

Nieves dijo...

¡Qué bien le estuvo! Muy buen final, me pilló totalmente por sorpresa esa vuelta de la tortilla. Me encanta la expresión "emocionalmente encorvado".
Un abrazo

Loli Pérez dijo...

Un personaje muy peculiar, sarcástico se podría decir. Un tono muy acorde con el protagonista.
Excelente micro, Pedro

abrazos enormes

El moli dijo...

La vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida. ¡Que buen relato Pedro! Se ocupo tanto de la presa, que descuidó sus propios bienes. Excelente maestro.
Un abrazo.

Henry dijo...

Me ha gustado esa otra historia que aparece al final y se ve como se va a quedar más sólo que la una.

Un saludo.

Gala dijo...

Hay que ver lo que puede dar de si una amistad!
Al "lolito" le salió mal el bussines, tan mal que le falló a dos bandas.
La niña supo esquivar los embistes, mientras la mujer y el amigo aprovechaban el tiempo más que bien.
Si es que invertir en riesgo es lo que tiene, puedes salir desplumado.
Me ha encantado esa guinda final, como has introducido el final de los coprotagonistas dentro del principal de la historia.

Besos mediterráneos.

Luisa Hurtado González dijo...

Adiviné, no sé por qué, que iba detrás de la Lolita. Ahora... me hace mucha gracia que lamente su ausencia como un chiquillo, un adolescente enamorado. La chica es lista, eso está claro, cuatro años esquivando es mucho tiempo.
Buen giro, bastante lógico y qué buenos amigos todso

mariajesusparadela dijo...

Por esta tu tierra decimos "Foi a dalas e levounas".

matrioska_verde dijo...

lo que se suele decir: "el tiro por la culata".

como siempre, genial... por un momento el relato te lleva a la indignación (por esos fines perversos) y al final hasta se siente cierta lástima por el protagonista.

biquiños,

Javier Ximens dijo...

jeje, Pedro, es lo que tiene ir a cazar lobos y dejar la majada desatendida. Como siempre, con tu exquisita prosa nos llevas camino del desenlace de maneras muy gratificadoras, pues da gusto leerte. Me han encantado las emociones que encorvan.

Miguel dijo...

Ya se sabe Pedro que a veces el invitado... queda como amo.

Aunque he decir... que siendo conocedor de tu trayectoria narrativa y mente creadora veía venir el desenlace. Lo veía venir.

Un abrazo gigante

Miguel

Anita Dinamita dijo...

Me gusta mucho, Pedro. En el segundo párrafo se ve como la situación le lleva a un desapego con todo, se convierte en el novio celoso, el padre desconfiado y se olvida de su vida.
Muy bien llevado
Un abrazo

Yashira dijo...

Genial Pedro, esa forma de contarlo, y además esa justicia final. Todas sus maquinaciones para nada, el plan le salió rana.

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Jejeje...Qué cabrón...ups perdón. Quería decir: que artistazo eres don Pedro, y que mala leche tienes.
Desde Córdoba, colgado del desenlace.

Rosy Val dijo...

jajajaja posiblemente el viudo ya le echó el ojo a su mujer antes de que él se lo echase a la Lolita
Muy bueno, me gustó tu relato.
Un saludo.

Janial dijo...

Se agradecen de vez en cuando los cuentos que acaban con final feliz. Muy bueno, Pedro. Gracias por escribirlo.

Víctor dijo...

Pues no le está nada mal, no. Y el micro tampoco está nada mal, no. Un abrazo, Pedro.

Patricia Nasello dijo...

Ja, se lo tiene merecido!!!
Gracias por urdir un micro que podría haber sido terrible y sin embargo me deja sonriendo.

Un fortísimo abrazo, Pedro.

Sandra Montelpare dijo...

Y le salió el tiro por la culata! Se hacen esperar tus actualizaciones pero salen relatos brillantes como este en primera persona, esa voz narradora tan bien llevada. Un placer pasar a leer.
Saludos van

David Moreno dijo...

En este caso quizá la vida le dio una lección al protagonista de tu micro. "Ay tío que cosas me dices..." jejeje me ha hecho reír.

Un saludo indio
Mitakuye oyasin

Juanlu dijo...

jajajaja, que cabronazo eres! es buenísimo, das tres giros enormes, ferpectos!

En pie! entra el maestro Pedro.

Un abrazo enorme!

Isabel Martínez Barquero dijo...

Todo queda en familia, aunque sea en una familia atípica y "cruzada".
Narrado con ironía desde el propio título, es un disfrute su lectura.
Un abrazo, Pedro.

Yolanda Almansa Saura dijo...

Turbulenta historia, Pedro. La luz de la amistad sincera que se vislumbra en su inicio, queda ensombrecida por la bajeza de las pretensiones del personaje. Pero el remate final añadido, le da un toque de "Final feliz". Al menos, para Lolita.

Un abrazo.

Petra Acero dijo...

Pedro, digamos que me ha sorprendido :) la, digamos, "concuspiscencia". No me esperaba ese final ¡Me encanta que me sorprendan!
Un personaje cercano, verosímil.
Una historia de un pobre hombre.

Un beso grande para ti.

Yolanda dijo...

Pedro, un gusto leerte, este micro muestra una historia que nos hace sonreír.

No tardes en regalarnos otra de tus perlas.

Besos.

Elysa dijo...

Brillante como siempre, Pedro. De alguna manera me esperaba ese desenlace. Mientras perseguia a la Lolita por detrás estaba ocurriendo la auténtica historia, muy merecido y justo final.
¡Muy bien el tono de la voz narradora!

Besitos

Melvin Rodríguez Rodríguez dijo...

Cada amistad es única pero... joder!!!

Buen trama que se va hilvanando hasta llevarnos a territorios inesperados.

Abrazos.

Humberto Dib dijo...

No voy a ser políticamente correcto: Me moría de ganas porque pudiera realizar sus fantasías con la adolescente, pero ya ves, tú y tu cruel decisión de autor, lo has dejado sin nada.
Así no, Pedro, y después dicen que yo escribo cuentos crueles, ja. Esto sí que es cruel.
Un abrazo, amigo.
HD

Susana Camps dijo...

Paso tardísimo, cuando ya te ha comentado todo el mundo, pero igual quiero decirte que me gusta mucho cómo urdes la voz de este relato, sobria, engañosa y pasmada al final, conduciéndonos hacia la sorpresa sin tropezar en un posible enredo de nombres y personajes (que son multitud, para el reducido espacio); todo con tus habituales frases brillantes, como la sonrisa "perturbadoramente lúbrica" o, ni que decir tiene, la de inicio.
Abrazos sonrientes

Nicolás Jarque dijo...

Pedro, gracias que he podido encontrar un momento para actualizar mis lecturas y no me hubiese perdonado perderme este relato.

La amistad es subjetiva, quizás de las que más en la vida, por eso las elegimos y las cuidamos según nuestro baremo particular. Aquí un ejemplo claro, en el que todos parecen aceptar el engaño, no sé si por la amistad sincera o por otros interés más oscuros. Lo que si que es cierto, es que hacen una buena panda de amigos, incluido la Lolita.

Buen juego de toma y daca.

Un fuerte abrazo.

Miguel Ángel Pegarz dijo...

Quien a hierro mata...
Me encanta y la frase "ya entonces parecía ser consciente de poseer un culo capaz de modificar las voluntades más férreas." merece ya leerse aunque fuera una novela entera.

Manuel Rebollar Barro dijo...

Bueno, la amistad es lo que tiene. Hasta cierto punto había un intercambio de parejas. Uno real y otro deseado. Buen giro final

Abrazotes

Manuel Rebollar Barro dijo...

Bueno, la amistad es lo que tiene. Hasta cierto punto había un intercambio de parejas. Uno real y otro deseado. Buen giro final

Abrazotes

Juan Esteban Bassagaisteguy dijo...

Espectacular.
Con tres fases muy bien demarcadas (para mí...), como lo son el inicio dramático, que nos hace poner a los lectores a favor del protagonista, buen samaritano él; luego el vuelco tremendo a mitad de relato con la real intención de aquel (otra que buen samaritano, je); y, finalmente, la conclusión donde todo se entremezcla de la mejor manera.
Te felicito, ¡excelente!
Saludos...

josé manuel ortiz soto dijo...

Pedro, muy buen texto, con cambios de tono, y con final, aunque no inesperado, sí bien merecido.

Saludos.

María Eva Ruiz dijo...

Una vez más ha merecido la pena esperar tanto tiempo tus micros. Hilvanas la trama con tanta maestría que esto más que un microrelato podría ser una micronovela.

Magnífico Pedro como siempre.

Un abrazo muy grande,

Eva.

Enmascarado dijo...

Perseguir lolitas, depende de para qué edad no es nada sano. Como es el caso, puede terminar uno con el termostato roto y rascando techos.
Genial Pedro.

Un abrazo

Xesc dijo...

Me hace mucha ilusión poderte comentar después de tanto tiempo (el mío) fuera de órbita.

Me gusta mucho el tono del relato que, ni en el momento final cede ni se pierde en lo anecdótico ni lo gracioso. Se mantiene firme, resignado y expectante.
Un relato muy tuyo, un relato made in Pedro.
Bravo.
Abrazos

CDG dijo...

Me sumo a los elogios previos. Cuentas la historia con precisión y tacto, profundidad y humor, y el uso del lenguaje es de aplauso (hombre emocionalmente encorvado: gran imagen)

José Ángel Gozalo dijo...

Buen relato Pedro. Tan preocupado esta el lobo con piel de cordero en seducir a su presa que descuida a su mujer y al final se queda solo. Recibe su propia medicinapor intentar aprovecharse de su amigo.

Enhorabuena y feliz navidad.

Laura dijo...

Las amistades cruzadas con intereses más allá de la propia amistad, desencadenan una situación muy particular en tu micro.

Me gusta que alguien empiece "solo" y muy encorvado, para terminar con otro personaje también en soledad aunque no sé si encorvado emocionalmente. De Lolita no digo nada, que tiene que estudiar, :)

Lo cuentas maravillosamente Pedro y es un gusto leerte.

Besos y un abrazo para tí.

Raquel dijo...

Llego tarde, así que sólo me queda unirme a las felicitaciones y pedirte que no tardes tanto en volver a publicar.
Besos!!!

Miguelángel Flores dijo...

Hay poca gente con la que disfrute de la lectura como contigo. Es impresionante el dominio que tienes. Puedes contar lo que sea, que lo que me embelesa es como lo construyes, Pedro. Enhorabuena.

Un abrazo,

GeNN dijo...

Me gusta el tono del cuento, la manera en que lo cuentas, usando ese narrador que no se esconde (aunque primero intente seducirnos) y muestra todas sus vergüenzas.

No tardes en volver, Pedro.

Un saludo desde el sur.

Rosa dijo...

Uppsss qué tarde llego. Gracias por regalarme una gran sonrisa al leerte.

Besos desde el aire

omar enletrasarte dijo...

una obra de arte,
por su sencillez, sus escenas breves y elocuentes
saludos

omar enletrasarte dijo...

una obra de arte,
por su sencillez, sus escenas breves y elocuentes
saludos

Ricardo Miñana dijo...

Hola Pedro, tu relato es inquietante
hasta el final, un placer.
que tengas una buena semana.
felices fiestas.

JOAQUIN DOLDAN dijo...

y feliz navidad , salud!

Mariela dijo...

Muy buen micro, Pedro, especialmente por el uso de la terminología que señala un enfrentamiento desde el vamos: la coartada, el parapetarse, el desarmarse, los asaltos. Aquí no se engaña nadie desde el principio, al menos en lo que a la “chiquilla” refiere, porque no en balde nombrás los catorce años en el primer enunciado; esta no es una nena sino una Lolita consciente de serlo. El desenlace sorprende porque la mención de la universidad y la distancia parece ir cerrando la historia, y es efectivo en proporción directa a su brevedad, llevándonos de la mano al tópico del burlador burlado que el espacio no parecía presagiar en este caso. Ya sabés que le escapo a palabras como concupiscencia (tuve que volver al micro para escribirla), pero en todo lo demás debo decir que me encantó.
Ah, y parte del engaño también va de la mano, claro está, con la imagen que acompaña al texto, con ese aire de amistad e inocencia bonachona que nada tiene que ver con estos cuatro personajes que, de inocentes, ni un pelo.

Mirella S. dijo...

Hola me gustó mucho tu blog, me encantan los microrrelatos y los tuyos son fantásticos, con finales mordaces.
Un saludo desde Buenos Aires y si tienes curiosidad, estás invitado a visitar mi blog.

Cortacuentos dijo...

Si señor. Buen microrrelato Pedro... bueno no, mejor. La verdad es que te haces rogar pero cuando apareces nadie te puede negar la calidad de tu prosa.

Unha perta gorda e a disfrutar do Nadal. Por certo, espero que pese a ser de Coruña o Apalpador te traía unha maga de castañas.

María Eva Ruiz dijo...

Que tengas unas bonitas Fiestas con tus seres queridos y para el Año Nuevo, pidámosle creatividad, aunque tú ya la tienes.

Un abrazo muy grande,

Eva.

FELICIDADES

Pedro Alonso Da Silva dijo...

Ten amigos para esto. Me has llevado de la mano por tus palabras recreando con nitidez cada escena en mi mente, sorpresa tras sorpresa. Me ha encantado el paseo.

Un abrazo.

Humberto Dib dijo...

Pedro:
Quiero desearte Feliz Navidad.
Un fuerte abrazo.
HD

Ana Crespo Tudela dijo...

Un final irónico para una historia que se vislumbraba dramática, gracias por darnos un respiro y permitirnos disfrutar de una dulce venganza.

Si has sobrevivido a la mitad de las fiestas, ¡enhorabuena! Te deseos un 2013 alejado de los malos pronósticos.
Un beso

Anónimo dijo...

Gran historia, amo esos finales tan irónicos, qué retorcida es la vida.

Bágoas dijo...

Llego 67 comentarios después, pero eso es culpa tuya, que tienes muchos fans.

Vengo solo a hacer acto de presencia, que ya te di mi opinión hace tiempo. Ya sabes, pequeña obra maestra, como siempre.

Me gustó. Carry on.

Javier Merchante dijo...

Donde las dan, las toman. ¡Feliz 2.013! Lo mejor para ti tus letras.
Un abrazo.
Javier.

Anónimo dijo...

buenísimo como siempre, tu relato con final inesperado y despertando morbo de cuanto lector se cruce.

felicidades Pedro y mi beso

Francesc Barberá dijo...

Me pasa a veces con tus textos que me saben a poco, es decir, me sugieren una historia más extensa, como una novela o un relato más largo. Y esta vez me he quedado esperando saber más de esos personajes que tan bien has retratado.

Un abrazo.

Diana Profilio dijo...

Querido Pedro, te deseo TODO lo mejor para el nuevo año!!! Un fuerte abrazo y a seguir deleitándonos con tus letras!!!

Juanlu dijo...

Amistad. preciosa palabra con la que terminar el año.

Espero que este 2013 nos una en proyectos e ilusiones conjuntas y que por fin una de esas quedadas nos una por unas horas.

Un abrazo enorme!!!

Unknown dijo...

La horma del zapato!!!!
que bueno.
Feliz entrada de año, Pedro.

Anónimo dijo...

Es como ir al barbero y salir trasquilado.

Abrazos Pedro!

Pablo dijo...

Ay! Esos culos "capaces de modificar las voluntades más férreas"... son lo peor! Gran micro, Pedro.

Unknown dijo...

Con maestría sacaste avante éste toro.
De acuerdo con la moraleja de que jamás funciona vivir todos juntos y hechos bola.

Berta dijo...

No te puedes imaginar lo difícil que es que me eche una carcajada con la literatura...y lo has conseguido!! Eres un fenómeno chico

Gorgias dijo...

Magistral. Digamos que es la inefable encarnación del "chivo cuernú".

Γοργίας

fco. javier dijo...

Imposible no sucumbir a la tentación de "exportar" este maravilloso relato. No es el primero. ni tampoco será el último.
http://fragmentsdevida.wordpress.com/2013/03/25/amores-cotidianos-lx-infidelidades-conyugales-relatos-de-pedro-sanchez/